1:Dormir es una necesidad biológica vital para el equilibrio físico, mental y emocional. Aunque la mayoría de las personas se enfoca en dormir entre 6 y 8 horas diarias —como recomiendan los especialistas en salud—, lo cierto es que la posición en la que dormimos también tiene un impacto significativo en el bienestar general. Dormir del lado derecho, en particular, ha sido asociado con ciertos efectos negativos que conviene conocer.
2:Drenaje linfático menos eficiente
El sistema linfático cumple una función clave: eliminar toxinas, desechos celulares y exceso de líquidos del organismo. Este sistema fluye principalmente hacia el lado izquierdo del cuerpo, donde desemboca en el conducto torácico, el cual drena en la vena subclavia izquierda. Dormir habitualmente del lado derecho puede interferir con este proceso, dificultando el drenaje linfático y favoreciendo la acumulación de líquidos o edemas, especialmente en personas con problemas circulatorios o linfáticos
Mayor presión sobre el corazón
Anatómicamente, el corazón se encuentra ligeramente inclinado hacia el lado izquierdo del pecho. Al dormir sobre el lado derecho, se puede generar presión adicional sobre el corazón, lo cual en ciertas personas —especialmente aquellas con enfermedades cardíacas previas— puede traducirse en palpitaciones, incomodidad o dificultad para descansar profundamente. Aunque no representa un riesgo directo para personas sanas, sí puede afectar la calidad del sueño y el ritmo cardíaco durante la noche.
ADVERTISEMENT
