El aceite de oliva con limón también es beneficioso para el corazón. Sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias ayudan a reducir los niveles de colesterol “malo” (LDL) y a aumentar el colesterol “bueno” (HDL), además de mejorar la circulación sanguínea. Esto disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares y mantiene las arterias más limpias y saludables.
Otro beneficio importante es su efecto sobre el sistema inmunológico. Gracias a la vitamina C del limón y a los antioxidantes del aceite de oliva, esta combinación fortalece las defensas del cuerpo frente a infecciones y enfermedades.
En conclusión, el consumo regular y moderado de aceite de oliva con limón puede ser un complemento saludable dentro de una dieta equilibrada. Esta sencilla preparación natural puede aportar múltiples beneficios, desde mejorar la digestión hasta proteger el corazón, siempre acompañada de buenos hábitos de vida.
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