Incorporar agua de arroz a tu rutina diaria de cuidado de la piel es simple y efectivo:
- Comience por limpiar bien su rostro.
- Rocíe el agua de arroz directamente sobre su piel o aplíquela usando un algodón.
- Déjalo absorber durante 15-20 minutos.
- Puedes enjuagarlo con agua tibia o dejarlo actuar durante la noche para una nutrición adicional.
- Terminar aplicando una crema humectante para sellar la hidratación.
Consejo : Úsalo 2 o 3 veces por semana. Si tienes piel sensible, haz una prueba en una zona específica.
Beneficios para la piel
El agua de arroz es rica en vitaminas B y E, aminoácidos, minerales y antioxidantes, que aportan varias ventajas para el cuidado de la piel:
- Aclara las manchas oscuras y las cicatrices al reducir la producción de melanina.
- Cierra los poros y controla la grasa con su efecto astringente natural.
- Calma la piel irritada y reduce el enrojecimiento o las quemaduras solares.
- Mejora la textura exfoliando suavemente las células muertas de la piel.
- Combate los signos del envejecimiento estimulando el colágeno y mejorando la elasticidad.
- Equilibra los niveles de pH, lo que lo hace ideal para todo tipo de piel.