Lava bien las manzanas y córtalas en trozos pequeños, dejando la piel.
En una olla grande, coloca las manzanas, la canela, la piel de naranja y el jugo de naranja.
Cubre la olla y cocina a fuego lento durante 30-40 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que las manzanas estén blandas.
Retira la piel de naranja y la rama de canela.
Tritura las manzanas con un procesador de alimentos o una batidora de mano hasta obtener una textura suave.
Agrega el edulcorante de tu preferencia al gusto y la vainilla (opcional).
Mezcla bien y cocina a fuego lento durante 5-10 minutos más, hasta que la mermelada espese.
Retira del fuego y deja enfriar completamente.
Consejos:
Puedes usar cualquier tipo de manzana que te guste, pero las manzanas verdes son ideales para esta receta porque aportan un sabor ácido que combina perfecto con la canela.
Si quieres una mermelada más espesa, puedes cocinarla durante más tiempo o agregar un poco de espesante natural como agar-agar o pectina.
La mermelada de manzana y canela sin azúcar se conserva en el refrigerador hasta por dos semanas.
Disfruta de esta deliciosa y saludable mermelada sin azúcar en tus tostadas, waffles, panqueques o como acompañamiento de yogur.
¡Buen provecho!
Beneficios de la mermelada de manzana y canela sin azúcar:
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